La vida implica invariablemente obstáculos, frustraciones, dolor y separaciones. El modo en el que manejamos esos momentos en nuestros primeros años desempeña un rol esencial en el desarrollo de nuestra actitud general hacia la vida. A muchos, esos momentos difíciles los mueven a limitar lo que ven o experimenta. Van por la existencia eludiendo toda clase de adversidades, aun si esto quiere decir que nunca se retarán a sí mismos ni obtendrán mucho éxito en su carrera. En lugar de aprender de las experiencias negativas, desean reprimirlas. Tu meta es seguir la dirección contraria y aceptar todos los obstáculos como experiencias de aprendizaje, como un medio para fortalecerte. De esta forma, abrazaras la vida misma.
En 1928, la actriz Joan Crawford disfrutaba de razonable éxito en su carrera en Hollywood, pese lo cual se sentía creciente exasperada por los limitados papeles que se le ofrecían. Veía que actrices menos talentosas que ella la aventajaban. Quizás esto se debía a que no era suficientemente resulta. Decidió expresar su opinión ante uno de los jefes de producción mas poderosos de la MGM, Irving Thalberg. No previo que este lo juzgaría como una insolencia y que era vengativo por naturaleza. Así, le dio un papel en un western, a sabiendas de que era lo último que ella quería y de que tal destino era un callejón sin salida para muchas actrices.
Crawford aprendió la lección y acepto su destino. Se aficiono al género. Se convirtió en una jineta experta. Leyó acerca del Viejo Oeste y su folclor le fascino. Si esto iba llevarla al frente, seria la actriz principal de los westerns. En el peor de los casos, ampliaría sus habilidades actorales. Esta se convierto en su actitud de por vida hacia el trabajo y los grandes retos que una actriz enfrentaba en Hollywood, donde una carrera suele ser muy corta. Cada revés es una oportunidad de crecer y desarrollarse.
En 1946, Malcolm Little, después conocido como Malcolm X y quien tenía entonces veinte años de edad, empezó a cumplir una sentencia de dieciocho años de cárcel por robo. La cárcel suele tener el efecto de endurecer al criminal y reducir su ya limitada visión del mundo. En cambio, Malcolm reevaluó su vida. Pasaba el tiempo en la biblioteca de la prisión y se enamoro de los libros y del aprendizaje. Esto lo hizo ver que la cárcel le proporcionaba el mejor medio posible de transformarse y de cambiar su actitud hacia la vida. Con demasiado tiempo en sus manos, estudio hasta obtener un titulo universitario. Desarrollo tuna disciplina que siempre había añorado. Se capacito y convirtió en un experto en oratoria. Abrazo la experiencia sin amargura y salió mas fortalecido que nunca. Una vez fuera de la cárcel, vio todo dificultad, grande o pequeña, como un medio para probarse y afianzarse.
Aunque la adversidad y el dolor suelen escapar a tu control, puedes determinar tu reacción y el destino que se derive de ello.